sábado, 9 de diciembre de 2006

LA ROPA SUCIA

La estampa es de ayer mismo. No es medieval por el balde de plástico, y no representa a una lavandera de un Nacimiento porque la bata de güatiné pone modernidad a la imagen. Y es que hasta hace poco la ropa sucia se lavaba fuera de casa, en el arroyo más próximo, y se tendía a blanquear y orear al sol. Y como los tiempos no cambian, que lo único que hacen es dar vueltas, pues ete aquí, que a pesar de que casi todo el mundo (desarrollado) tiene lavadora, secadora, centrifugadora, hemos vuelto a sacar a lavar la ropa sucia fuera de casa.
«¿Y esto quién se lo dijo?, pues me lo dijo mi vecina del cuarto que lava mas blanco, aunque todos sabemos que es una marrana, pero claro si te dan 1000 € por decirlo, pues vas y lo dices, menuda es esa. Esa sería capaz…»
Apago la tele, meto la ropa en la lavadora, la pongo en marcha y me siento delante de su ciego ojo de buey, contemplando como una camisa abraza tiernamente a un calzoncillo mientras se dejan mecer por olas de espuma del detergente. ¿Quién necesita televisión, habiendo un arroyo cerca o lavadoras para lavar la ropa sucia...? pues seguramente algún retrasado.


1 comentario:

Anónimo dijo...

Tiene usted toda la razón. Este es un pais de retrasados y descerebrados, que por dos duros pierden la dignidad y se humillan a ellos mismos y a los medios que les dan acogida. (Toño C.)